PRENSALATINA/Brasil.- Un total de 888 miembros de aldeas originarias murieron por la Covid-19, reveló la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB) que hoy presentará el informe Nuestra lucha es por la vida.
El documento, que mostrará datos sobre los impactos de la pandemia entre las comunidades nativas, se lanza este 10 de diciembre, fecha en la que la Asamblea General de las Naciones Unidas oficializó la Declaración Internacional de los Derechos Humanos.
Los organizadores de la presentación indicaron que se realizará a través de redes sociales de la APIB, en conjunto con grupos indígenas de base, el Frente Parlamentario Mixto en Defensa de los Derechos de los Pueblos Indígenas, movimientos sociales y asociaciones.
‘Nuestra lucha es por la vida’ resulta un material que integra las acciones de control social del Plan de Emergencia Indígena, instrumento elaborado por la APIB para exigir al Gobierno federal el cumplimiento de su deber constitucional de proteger a sus pueblos y organizar frentes de acción para el enfrentamiento de la emergencia de la pandemia.
Las denuncias de violaciones de derechos, el análisis de los datos presentados por la administración de Jair Bolsonaro y las medidas para combatir la propagación del virus son las principales cuestiones que se abordan en el informe.
‘También mostramos en este documento las miles de acciones realizadas por el movimiento indígena en todo Brasil para salvar vidas. No queremos ocupar el papel del Estado, pero no es una opción para quedarse al margen ante tanta omisión política y violencia’, señaló Sonia Guajajara, coordinadora ejecutiva de la APIB.
Para la articulación, además del virus, las amenazas a sus comunidades son muchas y se intensifican con la negligencia y ataques del gobierno de Bolsonaro.
Según datos del panel de Emergencia Indígena, actualizados hasta anoche, la Covid-19 afecta a 161 pueblos nativos en todo el país, donde se contabilizaron 41 mil 250 miembros contagiados y 888 defunciones.
car/ocs
0 comentarios