EFECTOCOCUYO/Amazonía.– No sólo en las ciudades más grandes. Para el 24 de mayo se reportaban 134.337 contagios de COVID-19 y aproximadamente 7.967 fallecidos en la región llamada Panamazonía y conformada por áreas de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Guyana Francesa, Perú, Surinam y Venezuela.
Esto representa un aumento de 58% de contagios y 56% de fallecidos en una semana. Entre los nueve países que conforman la región , 71% de los casos se encuentran en Brasil, seguido por Perú (19,8%), Bolivia (4,2%), Colombia (2,6%) y Ecuador (1,9%). Esto de acuerdo al cuarto Boletín de seguimiento del COVID-19 en la PanAmazonía de las ONG venezolanas Wataniba y Orpia.
Brasil, el más grave
Dentro de la amazonia brasileña, el estado Amazonas lidera las estadísticas de contagios confirmados (29.867). De éstos, 47% se encuentra en su capital, Manaus y el restante 53% está distribuido en 60 de los 62 municipios del estado, incluidos los tres fronterizos con Venezuela.
El estado brasilero con mayor número de fallecidos es Pará, que ocupa el segundo lugar en el país con casos de contagio y el tercero en la Panamazonia.
Para el 1° de junio de 2020 Brasil sobrepasa los 500 mil contagiados y casi 30 mil fallecidos, es el segundo país en contagios y el cuarto con más muertes, superando a España. Por encima están Estados Unidos, Italia y Reino Unido.
El segundo lugar en estas estadísticas para la región amazónica lo ocupa la provincia peruana de Lambayeque, con 6.075 personas afectadas y 1.235 fallecidos. En cuarto y quinto lugar están otros dos estados de Brasil, como son Maranhão (21.191 casos y 754 fallecidos) y Amapá (6353 casos y 163 fallecidos).
Amazonía venezolana
La Amazonía venezolana no escapa a la realidad del país, ni al contexto regional. De esta forma, para el 24 de mayo, los estados Amazonas, Bolívar y Delta Amacuro agrupaban 164 casos, en lo que representa el mayor aumento porcentual para la Panamazonia, con 556%, seguido de Brasil (68%) y Bolivia (46%). No se reportan fallecidos.
Los 164 registros de personas contagiadas se concentran en el estado Bolívar, mayoritariamente en el municipio Gran Sabana, seguidos de los municipios Heres y Caroní. En el estado Amazonas, los casos se distribuyen en los municipios Río Negro y Atures. En Delta Amacuro, los casos se asocian a los municipios Tucupita y Casacoima.
Para el 31 de mayo de 2020, los tres estados de la Amazonía venezolana acumulaban 212 casos con 188 en Bolívar, 10 en Delta Amacuro y 14 en Amazonas. es decir, un aumento de 14,63% en una semana.
En la frontera internacional, sólo los estados colombianos no habían reportado contagios hasta el 24 de mayo pero el la semana siguiente se confirmaron primeros casos en Guainía (6) y Vichada (2), fronterizos con Amazonas.
Por otro lado, los dos estados brasileños fronterizos (Amazonas y Roraima) se encuentran en una curva de aumento, al igual que las provincias de Guyana que se superponen con la zona en reclamación de Venezuela en el Esequibo. Tanto en el estado Bolívar, como en el estado Amazonas venezolano, la mayor parte de los casos detectados provienen de Brasil. Desde Boa Vista en el caso del municipio Gran Sabana y de San Gabriel de Cachoeira en el caso del municipio Río Negro.
Retornados
De acuerdo con las estadísticas oficiales, hasta el 24 de mayo, en la Plataforma Patria CoVid-19, de las 2.133 personas que ingresaron a Venezuela por el estado Bolívar desde Brasil, 120 habían sido confirmadas como positivas para la enfermedad (5,6%) y es el segundo punto de entrada del país.
En el caso del estado Amazonas, de 109 personas que entraron al país procedentes de Brasil, 10 dieron positivos (9,1%). Esto guarda relación con la mayor incidencia de la epidemia en el estado Amazonas brasileño en comparación el estado Roraima. Sin embargo, otro aspecto que resulta preocupante es la gran cantidad de personas que ingresan por el estado Apure, adyacente a la Amazonía venezolana, procedentes de Colombia, aunque para este momento la proporción de personas contagiadas que han ingresado por esa vía representa el 1,4%.
El número de casos en los municipios que son limítrofes con la Amazonía venezolana alcanzan 1.299 personas, con 37 fallecidos. Esto representa un aumento de 110% y 54%, respectivamente, con respecto al 17 de mayo.
Población indígena
Los pueblos indígenas de la región están enfrentando esta pandemia con muchas dudas y con llamados a los diferentes gobiernos para lograr el apoyo necesario ante lo que podría ser su mayor reto en términos de salud de los últimos años.
En el caso de los estados amazónicos de Brasil, los indígenas afectados ascendían a 633, para el momento de corte de este boletín, donde el municipio más afectado es Alto Río Solimões, con 286 registros. Mientras en Colombia, el estado Amazonas ya contaba con 320 casos, principalmente en la ciudad de Leticia, con 297 reportes.
Son ocho los casos confirmados en Venezuela, seis del pueblo Yeral y dos del pueblo Kurripako, todos en el estado Amazonas. Los fallecidos ascienden a 36 en Brasil y a diez en Colombia sin muertes en Venezuela.
No obstante, en la frontera sur de la Amazonía venezolana es preocupante la situación de los tres distritos sanitarios especiales fronterizos de Brasil: Yanomami, Alto Río Negro, Leste de Roraima, donde están confirmados 85 casos de contagio y cinco fallecidos.
Dichas entidades tienen puntos de paso conocidos con los respectivos municipios venezolanos (de oeste a este): Río Negro, Alto Orinoco y Gran Sabana. Hasta el momento no se reportan casos en indígenas del estado Bolívar, sin embargo, con la alta tasa de retorno de venezolanos, es una situación de alto riesgo. Así mismo, preocupa la alta proporción de personas contagiadas ingresando por el estado Amazonas (la más alta de los diferentes pasos fronterizos).
Más de 500 indígenas fallecidos
Un reporte de Europa Press y publicado por Correo del Caroní revela que otras ONG y organizaciones sociales contabilizan 504 indígenas muertos y 2.278 contagiados de COVID-19 en la PanAmazonía, de acuerdo a la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica) para el 28 de mayo de 2020.
Uno de los principales problemas es la falta de oxígeno, esencial para atender a los enfermos con problemas respiratorios, según ha explicado Pati Blasco, del Vicariato San José del Amazonas, situado en la triple frontera de Brasil, Colombia y Ecuador, y miembro del Equipo Itinerante de la Red Eclesial Panamazónica (Repam).
El secretario ejecutivo de la Repam, Mauricio López, advierte que los indígenas se están devolviendo de las ciudades por las malas condiciones pero en sus áreas ya tenían años enfrentando carencias por falta de hospitales y brotes de malaria y otras enfermedades. Alertó que en Brasil se dan “actitudes cuasi criminales” contra las medidas recomendadas por las autoridades sanitarias mientras persiste la extracción de recursos naturales, la persecución contra líderes ambientales e indígenas” y aumentan los incendios forestales, lo que también estaría pasando en Bolivia y Colombia.
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