‘Tiempos de pandemia’ en la voz de las juventudes étnicas

Colabora: Administrador

Publicado: 2 Nov, 2020

LARAZÓNPÚBLICA/Colombia.- Pensar en la diversidad y su protección integral en estos ‘tiempos de pandemia’ es reconocer las consecuencias particulares del virus, por ejemplo, en los jóvenes que hacen parte de comunidades étnicas afro e indígenas.

Ese es un primer paso hacia la equidad social: reconocer sus contextos. Desafortunadamente, las cifras sobre juventudes étnicas e indígenas son escasas y, debido al subregistro, no dan cuenta de las realidades sociales, tanto rurales como urbanas, que enfrentan las y los jóvenes pertenecientes a estas poblaciones.

Aun así, es evidente la complejidad de esos contextos: en 2019, Bogotá recibió 4.362 jóvenes desplazados, Medellín 12.557 y Cartagena 827; en estas 3 ciudades sucedió el 35% de los casos de suicidio juvenil del país en el 2018; y la deserción en educación superior entre mujeres de estas tres ciudades es del 53%.

Un segundo paso es reconocer el rol de estos jóvenes y elevar y fortalecer sus voces. Ese es el propósito de DALE Equidad (Desarrollo Autónomo Liderazgo Efectivo), un programa impulsado por la Corporación Manos Visibles y USAID como una alternativa para la formación y proyección del liderazgo juvenil en medio de la pandemia.

Los siguientes son algunos de los pensamientos de más de 130 jóvenes seleccionados para recibir formación durante 5 meses con el fin de fortalecer sus liderazgos individuales y colectivos.

La pandemia, una amenaza a la memoria y la sabiduría indígena

Andrea Katerine Yate Erazo**

Además de las consecuencias evidentes de la pandemia en la economía, la salud y la política en Colombia, el coronavirus también se ha convertido en una amenaza directa a la memoria de los pueblos indígenas colombianos. ¿Por qué?

Los fundamentos del conocimiento indígena descansan en la memoria de los adultos mayores, a quienes se les llama taitas, mohanes o guías. Ellos son los protagonistas de los círculos de palabra, una práctica de la mayor importancia dentro de la vida comunitaria de los pueblos indígenas.

Se trata de espacios en los que los mayores comparten los saberes y transmiten la sabiduría ancestral a las siguientes generaciones. Una sabiduría que se adquiere con el paso del tiempo y que se afianza y se fortalece en cada círculo de palabra.

Debido a la alta tasa de mortalidad de los adultos mayores por el coronavirus, las comunidades indígenas han perdido a taitas, mohanes y guías. Los pueblos más afectados hasta el momento son el muisca, el pijao y el kogui.

Así que la pandemia no es solo una amenaza a la vida, también es una amenaza al conocimiento ancestral de los pueblos indígenas y la memoria de sus luchas, sus resistencias y sus procesos de fortalecimiento cultural y social.

Muchos estudiantes afrodescendientes de la ciudad de Medellín venimos de otros municipios y departamentos. Y en algunos casos, nuestras familias nucleares viven en zonas rurales en las que existe una relación especial con el territorio.
A raíz de la emergencia sanitaria causada por el Covid-19, algunos tuvimos que enfrentar retos particulares, hacernos preguntas inesperadas y tomar decisiones drásticas. La pandemia nos enfrentó a un dilema: regresar a nuestro territorio de origen y estar en familia, pero sin estudiar, o quedarnos en la ciudad estudiando, aunque en medio de incertidumbres.
Para quienes optamos por la segunda opción, quedarnos nos obligó a vivir sin la posibilidad de ir al territorio y a permanecer lejos de nuestra familia, aún en situaciones de pérdidas familiares.
Por la importancia que tiene para las comunidades afro el acompañamiento en los rituales mortuorios tradicionales que dan el adiós a los seres queridos difuntos, esta ha sido una circunstancia difícil de afrontar.
Y no es la única. Para comprender lo que ha representado el virus en las comunidades afrodescendientes es necesario, al menos, conocer las íntimas relaciones que se tejen entre los seres humanos, el territorio, y los elementos de la naturaleza que lo habitan.
La emergencia sanitaria y sus consecuencias particulares agravan los problemas que afrontan la juventud afro al tener que dejar sus territorios, así sea temporalmente para acceder a la educación. Esto deja en evidencia la necesidad de ofrecer educación de calidad y accesible en los territorios de estas poblaciones.
Mientras tanto, que hablar del tema nos sirva para hacer visibles las redes de solidaridad que se tejen en ciudades como Medellín, que se convierten en opciones de construcción alternativa de territorio y familia lejos de la ruralidad.
***Joven nacido y criado en la comunidad afro ribereña de Noanamá, Chocó. Residente en Medellín.

Ser niñas en tiempos de pandemia

Agustina Martínez Morelos****

Durante la pandemia de Covid-19, niños y niñas de sectores empobrecidos en Cartagena de Indias siguen siendo afectados y vulnerados en sus derechos, una prueba más de las condiciones precarias y la falta de protección de esta población en la ciudad.

Para niñas que hacen parte de organizaciones comunitarias en barrios ubicados en las faldas del cerro de la Popa, como Los Comuneros, Pablo Sexto Segundo, San Pedro y Libertad, San Francisco y La María, la pandemia ha provocado incertidumbre:

• Muchas no pudieron continuar sus actividades escolares por no contar con las condiciones necesarias para cumplir con las tareas virtuales.
• Para algunas, la situación se agrava porque la carga del cuidado del hogar ha recaído sobre ellas.
• Y, como es bien sabido, para algunas niñas su casa es también un espacio donde son violentadas.

Hoy, frente a estos nuevos retos, reafirmamos la premisa bajo la cual nos encontramos diversas organizaciones de base comunitaria cada 11 de octubre, cuando conmemoramos el Día Internacional de la Niña: “Niñas sin miedo, Niñas con voz propia”.

Seguimos fortaleciendo las redes de apoyo para hacerle frente a las múltiples violencias contra mujeres y niñas en nuestra ciudad y nuestro país. Y exigimos la presencia institucional desde un enfoque de derechos humanos, no aquella limitada a la represión policial impuesta en nuestros barrios.

También puede interesarle:

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: